Hidrógeno verde: ¿la mejor oportunidad para alimentar el futuro energético ecológico de África?

31/3/2022

"El hidrógeno verde aportará nuevos y diversos participantes al mercado energético, modificará la distribución y los suministros y pasará el poder de unos pocos a la mayoría."
Francesco La Camera, Director General de la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA)

Las economías africanas siguen persiguiendo sus objetivos ecológicos y cada vez gana más adeptos el hidrógeno verde, ya que será fundamental para reducir la importación de combustibles y químicos fósiles. Por suerte, la posición de África permite aprovechar la economía del hidrógeno verde.

El hidrógeno verde se obtiene al extraer hidrógeno de sustancias más complejas utilizando procesos «limpios» (que no emiten carbono). Estos procesos utilizan la electrolisis para dividir las moléculas de agua en sus componentes. Cuando la energía eléctrica que requiere el proceso procede de fuentes de energías renovables, las emisiones se reducen a cero. Esto se denomina hidrógeno verde (o limpio).

La única versión del hidrógeno que no produce emisiones de carbono, la verde, supone en torno al 0,1 % de la producción de hidrógeno total, aunque se espera que aumente a medida que se disnimuya el coste de las energías renovables.

Para que el hidrógeno limpio se convierta en un sustituto comercialmente viable a los combustibles fósiles, su producción debe aumentar rápidamente.

El 96 % del hidrógeno actual se obtiene utilizando combustibles fósiles.

En la actualidad, para producir hidrógeno «azul» se usa gas natural y para el verde la electrolisis del agua, por lo que, energéticamente, la eficiencia de la versión verde es hasta tres veces mayor.

El hidrógeno verde y sus derivados pueden alimentar vehículos mineros, camiones, autobuses, trenes, aviones y buques mercantes, y se puede utilizar para producir acero, fertilizantes y otros productos químicos de forma ecológica.

Lo verde es negocio

Según un informe publicado en septiembre por Research and Markets, una plataforma de Internet de estudios y datos de mercados, se prevé que el valor del mercado del hidrógeno a nivel mundial se multiplique por diez, de los 444 millones de USD de 2021 a casi 4400 millones en 2026.

Este aumento de la inversión en hidrógeno verde lo ha propiciado el endurecimiento de los objetivos de emisión de carbono a nivel mundial, ya que 90 países que representan el 80 % del PIB mundial se han comprometido a lograr emisiones cero (la mayoría en 2050, China e India en 2060).

No es fácil ser verde

Se necesita una enorme inversión inicial para construir la infraestructura necesaria para producir y transportar el hidrógeno verde. Si le sumamos las altas tarifas de la electricidad, el hidrógeno verde resulta muy caro de fabricar.

No obstante, si se invirtiera en electrolizadores en lugares donde abundan las energías renovables, la electricidad necesaria tendría un precio más competitivo y se reduciría el coste de producción del hidrógeno.

Este factor es muy importante teniendo en cuenta que el 60 % del coste total del hidrógeno proviene de la electricidad necesaria para producirlo.

Electrificar con antelación

Pese a estos retos, la carrera por el hidrógeno verde ha comenzado en África y varias naciones ya atraen la atención de los inversores.

Sudáfrica dispone de abundantes recursos naturales y tierra disponible, por lo que es un lugar ideal para producir hidrógeno verde, descarbonizar muchas de sus grandes industrias consumidoras de energía y entrar en un mercado global que cada vez demanda más combustible.

Se prevé que la economía del hidrógeno podría añadir entre 3900 y 8800 millones de USD al PIB de Sudáfrica en 2050 y crear entre 14 000 y 30 000 puestos de trabajo al año.

Hyphen Hydrogen Energy pretende empezar la producción en el Parque Nacional Tsau Khaeb en 2026. La empresa afirma que en los cuatro años que tardará en construir la planta se crearán 15 000 puestos de trabajo directos y otros 3000 más cuando esté plenamente operativa. El 90 % serán trabajadores locales.

Gracias a su enorme potencial en recursos renovables eólicos costeros y solares, Hyphen también ha puesto su mirada en Namibia para desarrollar la que sería la primera gigaplanta de hidrógeno verde de África.

Por sus recursos eólicos y solares, y el creciente interés por la tecnología del hidrógeno verde, África puede reclamar por derecho propio un puesto relevante en el panorama del nuevo mercado energético.

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